12 de diciembre de 2012
El porta-vianda
Esta vianda me la regaló la familia Miranda en el año 1987.
Ellos tenían en la calle Guillermo Torres un restaurante, y ahi empece a retirar la comida, al mediodía y a la noche, a la semana me regalaron este portavianda, que utilicé durante veinticinco años: Mirta y Carlos Miranda.
Actualmente voy a la casa de su hija Rosana, que vive en el barrio obrero, ella me hace a mí porque hace tantos años que los sigo, ella no tiene mas el negocio. Ella me prepara a mí la comida que prepara para su familia: sopa, puchero, bife, polenta.
Ellos siempre me ayudaron; y cuando yo no podia ir a buscar la comida, ellos me la llevaban.
Ahora decidí, despues de veinticinco años jubilar la portavianda y traerla a Ferrowhite para que quede como recuerdo de una época de mi vida.
Agradezco a la familia Miranda por su atención durante tantos años.
Etiquetas:
El ojo del arqueólogo: objetos y artefactos
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